La enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón.
Howard G. Hendricks Intelectual y escritor estadounidense.
Cómo vamos a esperar nada de los niños si antes nosotros no les respetamos, no fomentamos sus virtudes; no valoramos su esfuerzo o interés... Ante todo debemos quererles, confiarles nuestro apoyo y escucha, incluso ser para ellos una figura de autoridad no a la que temer sino en la que confiar. No podemos separar jamás del papel del educador la función de "educar para la vida" junto con educar en los conocimientos. Si ambas nacen desde el consejo de Hendricks será dos veces bueno.
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